Coloquio

El turno de ruegos y preguntas permitió aMontoro repasar algunos de los asuntos más actuales. El retraso de la edad de jubilación de 65 a 67 años le empujó a un ejercicio de ambigüedad. “Si se trata de promover  voluntariamente la estancia de las personas en el trabajo, estamos de acuerdo, pero hay que buscar estímulos económicos para prolongar esa voluntariedad. No se puede forzar legalmente como ha hecho el Gobierno y, además, esta cuestión no va a resolver el problema de España, que es el paro y el excesivo endeudamiento”.

No le sentó nada bien al diputado popular que alguien le recordara que el actual modelo económico, basado en una voraz tendencia a la construcción , se inició con Aznar. “El precio de los pisos noes la clave. Cuando nos fuimos, el déficit de la balanza de pagos era del 2,5%, pero en cuatro años ha llegado al 11%. La economía no tenía apalancamiento con el Gobierno del PP. Tampoco se financiaban las tomas de posición empresariales. El modelo económico no es decirle a la gente dónde invertir ni cuántos pisos construir. Andalucía se ha convertido en la segunda residencia de Europa. ¿Eso es malo? Es buenísimo para un país”, reflexionó.

Tampoco comparte Montoro la idea expresada ayer por el FMI de rebajar los sueldos para dejar atrás la recesión. “No estoy a favor ahora que hay una caída del consumo. Bajar salarios es un formidable error y además es inviable”. ¿Y el adiós de Manuel Pizarro? “Es una decisión personal y respetable, pero me habría gustado que siguiera”.