Fuensanta Coves

Coves relaciona la sostenibilidad con creación de riqueza y empleo “Economía y ecología son, hoy y por fin, interdependientes”

El sector genera más de 85.000 empleos directos en Andalucía, ligados en su mayoría a los residuos, al agua y a las empresas de ecoturismo

La consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, recurrió ayer a una sencilla ecuación que, a su juicio “todavía se le atraganta a más de uno en Andalucía”, para explicar que el desarrollo sostenible es la única forma de hacer crecer la economía y también la única que permite la Unión Europea: “Podemos crear más empleo ambiental y respetar nuestro entorno, los recursos en los que deben vivir nuestros hijos y nietos, o podemos esquilmar el agua, el suelo y la atmósfera”. En su intervención de ayer en el Foro Joly Andalucía, organizado por la empresa editora de Almería Actualidad, la consejera aseguró que “los postulados del desarrollo sostenible, pese a llegar con cierto retraso, han empapado todas las facetas del día a día en Andalucía” y puso como ejemplo al sector empresarial. Según Coves, las emisiones de CO2 por parte de la
industria andaluza se redujeron por primera vez el año pasado, con un descenso del 2,9 por ciento que “es unsoplo de esperanza”. En este sentido, la titular de Medio Ambiente recordó a los casi 200 centros productivos sujetos al Protocolo de Kyoto por liderar y superar con nota de sobresaliente la transición del sector empresarial andaluz.

Ante algo más de un centenar de asistentes, Fuensanta Coves explicó que “sin un compromiso ambiental nítido, el centro productivo de turno tiene asegurada una situación de inestabilidad en su entorno social” y reiteró que “hemos aprendido que los costes ambientales pueden llevar a una actividad económica a la crisis”. Es más, Coves aseguró que la sostenibilidad está estrechamente ligada a la creación de empleo y
riqueza. “Las tecnologías más respetuosas con el medio ambiente necesitan más mano de obra. El vertedero humeante no requiere ni un operario y la planta decenas. La central térmica necesita diez veces menos empleo que una empresa eólica por no decir el vertido al río frente a la depuración”.

La consejera explicó ayer que son más de 85.000 los empleos que genera el sector y que en sumayoría corresponden a los residuos y al agua, aunque elmayor número deempresas se dedica al ecoturismo. “Ecología y economía son, hoy y por fin, interdependientes”.

“Hay que avanzar en la reprobación social de los delitos ambientales”

Una de las ideas más reiteradas ayer en el Foro Joly Andalucía por la consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, fue la necesidad de que la sociedad andaluza avance en la reprobación social y judicial de las personas que cometen delitos ambientales y puso como ejemplo paradigmático de ese cambio de mirada los relacionados con la ocupación del territorio porque durante décadas se ha relacionado el crecimiento de la población con “algo bondadoso”. A su juicio, “quién da muerte a una especie amenazada, causa un vertido grave o provoca un incendio forestal merece ser considerado delincuente, aunque aún son muchos los que creen que el culpable no debe ser penado con la privación de libertad”. Fuensanta Coves detalló que en
los últimos siete años se han registrado más de 30 sentencias condenatorias para las personas que de manera dolosa o imprudente han provocado incendios en la comunidad andaluza, a las que se suman otras cinco en materia de venenos mortales -cebos- por una práctica histórica que casi acaba con especies como el águila imperial.

En su intervención, la titular de Medio Ambiente argumentó que la catalogación como delito en el Código Penal de la edificación en espacios con limitaciones ambientales sin la debida autorización ha supuesto un “cambio radical” en la concienciación de los ciudadanos. “Medio Ambiente ha dejado de ser un órgano generador de prohibiciones y se ha convertido en la esperanza de los ciudadanos que demandan la
protección de la virginidad de los espacios naturales”. Otro de los aspectos analizados en su conferencia fue el difícil tránsito de “estar inmersos en una naturaleza que nos cuida a protegerla nosotros porque se ha
debilitado por la acción del hombre”. En este sentido, la consejera almeriense puso sobre la mesa la
peligrosa situación que vive el bosque mediterráneo por la pérdida de población. “Se ha quedado sin los cientos de miles de cuidadores que antes tenía y ahora los incendios se multiplican”. La titular de Medio Ambiente afirmóque la solución pasa por el desarrollo rural y volvió a insistir en que el “incendio forestal no se acaba cuando se apaga, porque en ese momento es el turno de los agentes demedio ambiente, policías,

fiscales y jueces”. En materia de empresas, Coves detalló que con la nueva Ley de Gestión Integrada de Calidad Ambiental, que entra en vigor en enero, se unirá la prevención al concepto de “quién contamina paga”.

“Cabo de Gata es ejemplo y orgullo de la protección del litoral en Andalucía”

La consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, protagonizó el primer debate público del Foro Joly Andalucía en Almería. No faltaron a su cita con Almería Actualidad, las autoridades de las administraciones y una ingente representación de la Universidad y el tejido empresarial provincial motivados por la relevancia de lostemas que la consejera trató en su conferencia.

Fuensanta Coves reiteró ayer que la administración que dirige ha dejado de ser un órgano generador de prohibiciones y se ha convertido “en la esperanza de los ciudadanos en la custodia de los espacios naturales”. En este sentido, la titular de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía explicó que los almerienses quieren un “manto protector” para mantener siempre la virginidad de los principales enclaves de la provincia. “Las pruebas nos avalan: ni el 2% de la primera línea de playa del litoral protegido está urbanizado en los 40 espacios naturales de Andalucía, que suman un 36% de la costa andaluza”. En este sentido, la doctora en Farmacia por la Universidad de Almería explicó que “Cabo de Gata es el ejemplo y orgullo de la protección del litoral andaluz”. Fuensanta Coves añadió que en febrero se aprobará el segundo plan de ordenación de los recursos naturales (PORN) y destacó el “consenso” con el que se van a tomar las medidas necesarias para
la conservación ambiental de esta reserva de la biosfera. “Aunque el origen, la propia declaración de parque natural no fue del todo entendida por los ciudadanos, afortunadamente el freno a los proyectos urbanísticos de La Fabriquilla, Aguamarga y El Algarrobico que incluye el nuevo PORN tienen muchos más reconocimientos”, añade.

Otro de los asuntos tratados por la titular de Medio Ambiente fue el que definió como “cambio histórico” en la gestión del agua. Fuensanta Coves detalló que “como territorio marcado por su aridez, los almerienses siempre han sido pioneros en eficiencia del uso del agua con medios no convencionales, como la reutilización de las aguas residuales y la desalación”. En pleno siglo XXI, a juicio de la consejera, la solución al déficit hídrico no pasa por los trasvases, aunque se haya visto beneficiada considerablemente por el del Negratín y Tajo-Segura. Es más, la titular almeriense de Medio Ambiente “El agua no sobra en ningún sitio en tiempos de sequía, así que el modelo de trasvases ya está agotado. Trasladar los recursos hídricos supone unos costes ambientales y económicos que son insostenibles”, matizó Coves. “Almería anda en el camino de la desalación y la reutilización, fórmulas que no sólo aportan más recursos, sino que además ofrecen garantías con control en el tiempo y con menos impactos ambientales y territoriales”. La consejera argumentó que el principal ahorro debe concentrarse en el sector agrario, que consume en torno al 80 por ciento.

Fuensanta Coves también tuvo tiempo para criticar los obstáculos que algunos ayuntamientos de la provincia han puesto a la construcción de las desaladoras y explicó que “no las quieren poner a funcionar porque no son rentables electoralmente”. No en vano, la consejera argumentó que el futuro no traerá más precipitaciones, que serán muchas menos, y que “la sociedad no es consciente del coste de captarla, conducirla y depurarla”. Para eso está en tramitación la ley del agua que, a juicio de la consejera almeriense,
“es el reto por resolver en la concienciación medioambiental de los andaluces”.